La insoportable gravedad de la riqueza

Probablemente el título no sea del todo acertado; sin embargo, no deseo esperar más tiempo para tratar el segundo tema fundamental de la realidad como hipérbola.

Segundo Tema Fundamental
La vida del rico es aún más difícil que la del miserable.

Sobrevivir cualquiera lo hace, mejor expresado: la tarea de supervivencia es indispensable e ineherente al ser humano y, de hecho, a cualquier ser vivo. La riqueza en el sentido material es una creación cultural del hombre. En tanto creación del hombre es parte de su definición y de su realidad. Un hombre sin riqueza no es propiamente un hombre. Es una bestia.

Los roedores acumulan alimentos para época de penurias, sobreviven. Cualquier hombre que se dedique únicamente a mantener su propia vida no puede ser más que un eslabón inferior en la cadena alimenticia, en la composición del ecosistema.

El rico puede, por azares del destino o desatino propio, volverse pobre, viendo como toda su vida de satisfacciones y regocijos se van por la borda. Esto es verdaderamente un problema. Los pobres no pueden aspirar a ser ricos, no en una riqueza material propiamente dicha.

El sistema y las oportunidades estan configurados única y exclusivamente para aquellos que nacen en la cresta de la ola. De estos, solo unos cuantos podrán mantenerse ahi y la caida de unos cuantos eleva el nivel de este fenomeno que conlleva al enriquecimiento obsceno de los muy pocos privilegiados o afortunados.

Imaginese usted ahora la angustiosa vida que tienen que soportar, paradojicamente, aquellos que nacen entre halagos y metales preciosos. Es verdaderamente un infierno ver como los pobres quieren su riqueza y estar pendiendo de un hilo para mantener esa vida que tan pocos disfrutan. Pobres de los ricos.