Clap your hands say maybe!

Hoy un tema actual,
De los tres presidentes y el usuario anónimo.

México no existe. A decir verdad ningún país existe. Los países y naciones son conceptos abstractos que logran concretizarse a través de cauces históricos con un afán de tranquilidad y certidumbre. Nada en contra de esto, no me gustaría una constante amenaza sobre mis bienes y mi vida.

No obstante, este espacio territorial cuenta con ciertas herramientas que se sustentan en un contrato social. Este contrato social coquetea con Hobbes, con Groccio y con cualquier teórico que sea capaz de confundirnos con sus términos. En llanas palabras: Nuestro país existe porque día a día no nos esforzamos por acabar con él –casi todos.

De esto se desprende que: al momento en que un grupo significativo decida confrontar las instituciones, no hubiera de ser una sorpresa para el resto de la población. A final de cuentas lo que las mantiene es otro grupo idealmente unánime, realmente minoritario. Siendo esto último otro tema.

Cuando yuxtaponemos un cargo a dos individuos deberíamos de encontrar periodos de transición, de disputa o de confusión, o los tres al mismo tiempo. Cuando aunado está un tercero en exclusión es momento de voltear las palmas y analizar porque no es que nos estamos dando de puñetazos en la boca. ¿Por qué no nos valemos por nuestros propios medios? ¿Qué garantías tenemos?

El discurso incluyente y confortante suele ser el deseable. Juguemos al abogado del diablo: ¿y qué si nos vamos a una guerra civil? ¿vale la pena mi vida a cambio de una mayor equidad social? ¿mi indiferencia debe de protegerme de esta bola de revoltosos sin nada que hacer?

No tengo realmente una firme aseveración con respecto al tema, ¿Qué tan malo es que una figura sacuda nuestros cimientos? ¿No deberíamos de ir con algún politólogo a que nos explique? After all he's supposed to be the society shrink.